Mi Sofy hermosa. Hoy, como todos los días de mi vida, estás presente en mi corazón y en mi vida. No te imaginas cómo han sido estos 4 años sin tu presencia. Te extrañamos, pero también te recordamos en cada momento, en cada viaje, en cada reunión familiar, en los paseos, en las idas a la finca con tus abuelitos y primos; en fin, vas con nosotros a donde vayamos. Ahí, en ese espacio sagrado que siempre tenemos para ti. Eres la primera en embarcar. La que habita en mi alma.
Algunas veces, cuando nos reunimos con familiares, hablamos de ti, siempre recordándote cómo una niña dulce, soñadora y risueña. Con tu hermanito nos devolvemos en el tiempo y recordamos el tiempo que compartían, las travesuras inocentes que cometían y, también, esas peleas entre ambos que, aunque no lo creas, las extraña.
Llegan también a nuestra mente la celebración de tu cumpleaños, las montadas en los columpios, los abrazos que se daban. Tanta compañía que solo hoy queda en el recuerdo.
Tus primos se graduaron, sabes? Escribieron algo para ti en el anuario. Un detalle precioso el que siempre te lleven en su mente. Y cómo no mi niña linda, si mientras Dios te prestó a nuestra presencia, fuiste tan amorosa, excepcional compañera de aventuras, conversadora sin igual y bella por naturaleza. Cómo no extrañarte.
Todos te amamos. Mis amigas también, las recuerdas? Te imaginan divina. Con tu pelo rubio y esos ojos verdes que iluminaban no solo tu rostro, también el de que quienes mirabas con amor. Esos ojos, resplandecientes y puros. Cada que veo una niña así, llegas de inmediato a mi mente y mi corazón empieza a arrugarse y a llorar. Parece morirse. Y sobre vive al imaginar que deseas vernos fuertes el día de nuestro encuentro.
Nuestros días con papá y Martín siguen siendo con planes que tú también amabas: pasear a los perros, ir a la finca, salir a comernos un helado, compartir con amigos, reírnos un poco y disfrutar esos ratos en familia que alivian un poco el alma.
Tu hermana Carito tiene ahora dos bellos hijos. Hubieras sido la más preciosa tía y ellos, los sobrinos más felices.
Mi gordita. Te extrañamos más que nunca, pero sé que donde te encuentras estás disfrutando de algo maravilloso, y es de la presencia de Dios.
Que más puedo decirte? Eres y serás mi todo. Estarás aquí en cada espacio de mi vida. En cada amanecer y anochecer. Respiro tus recuerdos.
Mi Sofy, mi gran Sofy. TEN PRESENTE QUE VIVO, PERO QUE VIVO EN HONOR A TI.
Te amo por siempre!
Tu Ma!!
Lloré ❤️❤️❤️❤️
Lloré y lloré leyéndote, pero aún más te admiro por esa forma de llevar tú duelo ❤
Cuando escuche esta dolorosa noticia mi corazón se estremeció y desde entonces cada vez que leo alguna publicación tuya no se por que razón lloro. Me siento tan identificada debe ser por que soy madre de una princesa de 8 años. Siento que tu mensaje para nosotras las mamas es vivir cada instante y cada momento con nuestros hijos de manera intensa y hacer cada segundo inolvidable. Amarlos desmedidamente y hacerlos inmensamente felices. Las batallas definitivamente Dios las envía a los mas fuertes no me imagino siquiera estar en tu lugar. Gracias por este espacio y sin haber perdido aun algún ser querido todo esto nos acerca mas a la realidad que algún día todos partiremos y que mejor qu…
Es imposible no sentir un gran dolor al leer tus palabras. Es imposible que los ojos se llenen de lagrimas al recordar a Sofy tan hermosa. Solo tengo palabras de admiración y respeto por ti y tu familia. Que gran enseñanza para todos. Que fortaleza.. Dios, nuestra Madre María y todos los ángeles los fortalezcan, los llenen de amor y bendiciones porque se lo merecen.